viernes, 28 de marzo de 2008
Volver a empezar!!!
Voy a ir al grano: mi ahora ex novia y yo lo hemos dejado. Bueno, lo ha dejado ella, pero como yo también estaba… Y ahora estoy otra vez en el mercado, libre como un taxi.
Es terrible volver a intentar ligar, ni te acuerdas de cómo se hacia.
Te vas a un antro, te prendes un cigarrito, te apoyas en la barra… Y a esperar a que vengan, pero no vienen.
Y a la primer nena que te hace caso, le preguntas:
- ¿Estudias o trabajas?
Y ella te contesta:
- Estudio, no te molesta… ¿Qué te sirvo? (Es la chava que atiende la barra)
Así es que como no ligas, y te vas a tu casa, abres el cajón donde está el short que hace las funciones de pijama, ¿y qué te encuentras? ¡Una caja de condones a medias!
Y te da un agobio:
“¿Volveré a ponerme uno de estos alguna vez?”
Y como te entra la nostalgia te lo pones… Y te dices: “¡Qué solitos nos hemos quedado!”.
¡Tienes que hacer algo!
Así es que agarras tu agenda y empiezas.
Por la A: Ana, no, habla mucho. Angélica, no, fuma un chingo. Artilleros del 47 Quecas… ¡Huy, qué lejos, y yo con esta hambre!, quita, quita…
Por la B tenemos a: Banessa, ésta no, que no sabe ortografía. Belén… ¿Belén?
- ¿Belén? ¿Te acuerdas de mí? Soy Lalo, que me anotaste tu teléfono en una servilleta… sí, hace siete años, en las fiestas de Aviran, sí, sí, el que te tiró la cuba encima. ¿Qué tienes que ir a recoger al niño? Ah, vale, ok.
¡Era por tirar la servilleta!
Pero tú no eres el único que checa la agenda, tus amigos también. Así que Milagros y Pepe te invitan a cenar a su casa. Tú llegas, con tu traste con pasta en la mano, y cuando pasas al comedor, piensas:
“Un momento. Si somos tres, ¿por qué hay cuatro platos en la mesa?”
Pues porque Milagros tiene una amiga “superlinda”, que “tampoco sale con nadie” y con la que “seguro que tienen muchas cosas en común”. Eso de “superlinda” depende de si te hace gracia que sorba el flan. ¿Y cosas en común? Sí: la barba. ¡Vamos no es que tengamos cosas en común, es que es igual que yo!
Así es que ya desesperado te planteas: ¿dónde hay mujeres sin novio? ¡En un viaje organizado!
Y allá vas. Pero cuando subes al autobús y ves esas caras… te dan ganas de agarrar un micrófono, y decir:
“Vamos a ver, si hay alguien que sea feliz que levante la mano… y que se baje del autobús”.
En fin, que estoy de oferta. ¡Y que es una pena que se desperdicien esos condones que tengo en casa!
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1 comentario:
Mi querido Mr. Vox, yo quisiera "empezar" con usted, me encataaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, como escribe, lo que piensa, siga así por favro, se lo pido yo, una chilenita que ha quedado prendida de su Rincón del Vox....
Con cariño: Ana Fernanda
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